La sexualidad en las relaciones de pareja juega un rol importante en la dinámica propia de la relación y por supuesto en la de felicidad conyugal.

¿Qué es la sexualidad?

La sexualidad humana de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) se define como:

”Un aspecto central del ser humano, presente a lo largo de su vida. Abarca al sexo, las identidades y los papeles de género, el erotismo, el placer, la intimidad, la reproducción y la orientación sexual. Se vivencia y se expresa a través de pensamientos, fantasías, deseos, creencias, actitudes, valores, conductas, prácticas, papeles y relaciones interpersonales”

Teniendo en cuenta la definición anterior, podemos decir que, al hablar de la sexualidad en pareja no solo se habla del aspecto genital, sino de todos los aspectos que enmarcan una relación sexual consensuada.

Como pueden ser: las miradas, las caricias, los juegos previos, las palabras, los pensamientos y las fantasías, entre otros.

Es decir, todos aquellos comportamientos que puedan estar en el plano erótico son los que fomentaran la complicidad y pasión en una relación de pareja.

Como resultado de esto tendremos una relación de pareja con altos niveles de satisfacción.

Obstáculos para disfrutar de la sexualidad a plenitud

Ahora bien, existen algunos obstáculos que principalmente limitan disfrutar con plenitud la sexualidad con la pareja.

El agitado día a día estropean la sexualidad de las parejas, los quehaceres diarios dejan poco espacio para el disfrute de la intimidad.

Las reuniones fuera de horario laboral, el cuidado de los niños y del hogar, las extensas jornadas de estudio, la vida social y familiar, etc.

El cansancio al final del día es el enemigo numero uno de la intimidad en las parejas.

Además del poco tiempo, existen los prejuicios, tabúes y temores al hablar sobre las preferencias sexuales, sobre todo por razones de tipo social y cultural, que también afectan en gran medida del disfrute de la sexualidad en pareja.

Los problemas más comunes de la sexualidad en las parejas

Con frecuencia los problemas de las parejas con el sexo suelen encajar en una de estas seis categorías, según el doctor Michael Karson:

1. Una de las partes quiere más: Cada persona tiene sus propios ritmos y sus preferencias, y es normal que una de las partes demande más sexo que la otra. El problema surge cuando no se comunica el deseo de mantener más relaciones sexuales, entonces aparece el resentimiento y la frustración que afecta el bienestar de la relación.
2. La paternidad: La mamá siempre tiene que pasar más tiempo con los niños, y esto puede crear frustración en el hombre al ver que sus demandas sexuales no son atendidas. Por otra parte, los cambios hormonales en la mujer después del nacimiento de un bebé afectan las relaciones sexuales en la pareja.
3. Poca comunicación: No hablar sobre las preferencias y la intensidad de los encuentros sexuales, puede llevar a situaciones de infidelidad y traición.
4. Altas expectativas en la vida sexual en pareja: Pensar que la sexualidad en pareja siempre tiene que ser pasional, espontánea y salvaje, lleva a frustraciones profundas en las parejas.
5. Interés nulo por la sexualidad: La falta de interés en el plano sexual deteriora todos los demás aspectos de la relación de pareja.
6. Disfrutar de la sexualidad = libertad: Asociar la plenitud sexual con la libertad entorpece enriquecer la sexualidad en pareja. El sexo en pareja puede seguir siendo divertido, es cuestión de intimidad y complicidad con la pareja.

¿Qué mejorar?

• Comunicación: Es indispensable establecer una comunicación clara y abierta con tu pareja, escuchar sus opiniones, deseos, fantasías y necesidades con respecto a su sexualidad.
• Acuerdos: Es importante buscar estrategias de ayuda que los motiven a vivir nuevas experiencias en el campo de la sexualidad. El consentimiento de ambos para explorar nuevas áreas de la sexualidad.
• Espacio: Abrir espacio en la agenda para crea espacios adecuados para avivar la pasión en pareja. La pareja que son padres aprovechar de los abuelos y familiares o niñeras para propiciar tiempo en la intimidad.
• Creencias: Enfrentar las creencias culturales o sociales relacionadas a la sexualidad que interfieren en el desarrollo de experiencias sexuales placenteras. Abrirse a nuevas experiencias.

Podemos concluir que la sexualidad influye de manera trascendental en el buen funcionamiento y estabilidad de las relaciones de pareja, pues no solamente se trata de una conexión física sino también, la unión que representa la parte emocional.

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Espero que la información anterior sobre La sexualidad en las relaciones de pareja te ayude a mejorar tu vida, tu bienestar emocional y que comprendas en solo de ti depende el éxito de tus relaciones.

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